Se trata de personal con una gran formación en la organización y desarrollo de eventos. Colaboran dirigiendo al público, atendiendo a ponentes, o interviniendo en cualquier incidencia que pudiera darse durante el transcurso de un evento.
Existen diferentes especializaciones en cuanto a las tareas que desarrolla una azafata:
- Protocolo y relaciones públicas: Se trata de azafatas con conocimientos de protocolo, y en muchas ocasiones, su trabajo se realiza bajo las instrucciones del cliente. Son personas con formación en la asignación de puestos en mesas, ubicación de autoridades, colocación de banderas, etc.
- Transfer: Se trata de azafatas encargadas de recibir y guiar a personas desde estaciones, aeropuertos y demás zonas anexas a medios de transporte hasta el lugar del evento, o lugar de alojamiento. Hablan idiomas y son capaces de solucionar cualquier incidente que pudiera darse en el proceso de recogida y transporte de la persona a la que asiste.
- Azafatas de sala: Especialmente en la celebración de congresos, se encargan de que las comunicaciones funcionen perfectamente y el evento fluya con normalidad, evitando tiempos muertos y fallos en el normal funcionamiento de una ponencia o presentación.
- Azafatas de ferias: Personal con habilidades comerciales y sociales. Se encargan de distribuir folletos informativos, o hablar con clientes en los stand de las empresas, resolviendo dudas, mostrando productos y poniéndoles en contacto con la persona responsable.
El trabajo de las azafatas se desarrolla en eventos sociales, y en ocasiones en entornos donde se hacen necesarias habilidades de comunicación personal y corporativa. En la mayoría de los casos, una azafata desempeña una importante labor en la percepción que los usuarios o potenciales clientes tienen de una empresa. Es por eso que la formación y la experiencia son factores imprescindibles en la contratación de personal auxiliar.
